Mundo Nuestro/En 1939 el mundo entró en guerra, la más terrible de la historia. En México habíamos dejado atrás la nuestra y el país se encarrilaba hacia la urbanización sin freno que hoy nos agobia. ¿Fue colectivo el sueño de progreso?
Pero la ciudad de Puebla aún no se abalanzaba sobre el campo, reconocía sus límites coloniales, se sabía un manchón breve en medio de ese territorio de pueblos campesinos. Muy tímida, apenas se animaba a extender la Avenida de la Paz más allá de la 25 Sur hacia la fuente de Los Frailes.
Decenas de imágenes a todo color. Las iglesias, los barrios, el zócalo con sus árboles de cinco metros que 75 años después rebasan los veinte. Las montañas abiertas, sin caseríos, y la Malinche deslumbrante. La Pirámide de Cholula, libre, con su iglesita, sin imaginar el acoso que le caería encima. El tren Mexicano del Sur a todo vuelo de regreso de Oaxaca, cuando nadie imaginaba su colapso como transporte estratégico.
Es cine, los cuadros en movimiento revelan la ciudad que fue.
Yo extraigo uno:
Ese niño panadero habrá nacido en 1930, ¿a dónde lo habrán llevado sus pasos presurosos? Sus pies descalzos, su pobreza, pero también su garbo y su enjundia. ¿Qué ciudad vio crecer a ese niño?
No es común una película que nos contenga. Para ir a aquellos años idos tenemos sobre todo la fotografía. Ahí están Méndez o Josafat Martínez, y en estos días nuestros los esfuerzos enormes de Lilia Martínez o Puebla Antigua con archivos armados con esmero, cada vez más auxiliados por la digitalización. Pero muy poco cine. Acaso se ha logrado reconstruir aquellos años viejos, como con la Enamorada en los portales cholultecas o la sobreviviente muchacha de Arráncame la vida buscando a la bruja en el barrio de Xonaca.
¿Pero un registro documental de los años treinta?
Por eso sorprenden estos coloridos minutos que Gustavo Velarde Tritschler ha editado y ha subido a Facebook, y no queremos que terminen. Las escenas forman parte de un tiraje realizado por el ingeniero norteamericano, reconocido viajero y cineasta ameteur Watson Kintner (EU, 1890-1979) en uno de sus viajes a México en 1939, y forman parte del acervo existente en los archivos de la Universidad de Pennsylvania, con escenas de México, Guatemala, Etiopía, Irán, India y Australia.
Por esta ciudad nuestra que se fue, cómo se lo agradecemos.
https://www.facebook.com/video.php?v=10203633096852364&fref=nf
Piquera tradicional.