Este semestre fue uno de mucha discusión y propuestas en la Facultad de Ciencias de la Comunicación de la BUAP. La comunidad de la facultad demandaba a las autoridades de la ciudad y del estado una solución para la inseguridad en la vialidad Cúmulo de Virgo desde hace años, sin embargo el conflicto territorial entre Puebla y Cholula finalmente resuelto en el Congreso del Estado el año pasado no había permitido que estas demandas encontraran eco, pues las municipalidades de San Andrés y de Puebla no se responsabilizaban de la zona.
El problema se remonta desde la creación de la vialidad misma, en el año 2007, pues desde un principio fue proyectada con velocidades inseguras en una zona escolar, en la que habría de darse en los años siguientes un amplio crecimiento de las unidades académicas de este campus de la BUAP.
Al situar un espacio de alto flujo peatonal junto a una vía como la Atlixcáyotl, y luego construir a un lado otra con una velocidad alta como Cúmulo de Virgo, se puso en peligro la vida de todas las personas que cruzan por ahí diariamente. Lamentablemente en 2009 un alumno de la facultad murió atropellado por un vehículo de la universidad. La respuesta fue un puente peatonal, al igual que en muchos otros puntos de la Atlixcáyotl, donde muchas más personas también han muerto y siguen muriendo atropelladas por automovilistas que circulan a velocidades altas.
En un principio en esa zona sólo se ubicaba la facultad de comunicación, pero poco después seguiría el Complejo Cultural Universitario (CCU), las unidades académicas de Etnocoreología, Música, Artes Plásticas y Audiovisuales, y Teatro, así como el Instituto de Ciencias de Gobierno y Desarrollo Estratégico. El número de personas que cruzan esas vialidades ha aumentado, pero la inseguridad no había sido combatida.
Una vez definidos los límites en diciembre del 2013 y habiendo respuesta del actual rector de la universidad, se emprendieron los trabajos para crear una propuesta al gobierno del estado, con el afán de satisfacer la demanda de una calle segura, donde cualquier persona pudiera cruzar con el menor riesgo posible.
El rector anunció en septiembre el proyecto de un puente peatonal sobre Cúmulo de Virgo, realizado por la Dirección General de Obras (DGO). Semanas después, un grupo de estudiantes de la Facultad de Arquitectura y yo empezamos a trabajar en una propuesta alternativa, en la que el cruce para peatones se hiciera a nivel de banqueta, en vez de elevado. Nuestra propuesta fue entregada a la Secretaría de Infraestructura del gobierno del estado en noviembre.
Luego de tres semanas, el rector anunció públicamente la construcción en una entrevista. Esta declaración fue criticada por algunos estudiantes de la facultad y de la zona del CCU en general. En ese momento la propuesta de los estudiantes fue difundida en medios de comunicación.
Poco antes de terminar el semestre, autoridades la universidad contactaron al grupo que trabaja el proyecto del paso a nivel de banqueta, con la intención de conocer el trabajo que los estudiantes estaban haciendo. En una reunión con un representante de la secretaría general de la universidad, la dirección de la facultad, y estudiantes interesados en el tema, se acordó que se haría una exposición de los dos proyectos, para hacer una posterior consulta con la comunidad en enero del próximo año.
Esta exposición tuvo lugar en la facultad el 3 de diciembre, y participó el titular de la DGO. Él presentó ante profesores y alumnos el proyecto del puente, además de un video en el que se ilustra cómo quedaría.
(Video del puente -> https://www.youtube.com/watch?v=DgE9wAd0_2w )
En contraste con esta propuesta se expuso el proyecto del paso a nivel de piso. Se mostró el documento entregado a la Secretaría de Infraestructura, que puede ser consultado en el siguiente enlace: http://www.scribd.com/doc/248188509/Peticion-y-propuesta-para-paso-peatonal-a-nivel-de-banqueta
Publiqué ambas propuestas en mi perfil de Facebook en días pasados, y los comentarios pueden ser vistos en estas publicaciones: https://www.facebook.com/photo.php?fbid=10152404373880426&set=a.398473510425.182892.538250425&type=1 y https://www.facebook.com/dobby.loca/posts/10152404372865426
Entre los comentarios no se ha visto apoyo al puente peatonal. Uno de ellos, en la publicación del recorrido virtual del puente, es del ex coordinador del Instituto Municipal de Planeación, Luis Olmos, quien apoya el paso a nivel de piso, y sentencia que “Algo que existe en apariencia, que no es real, Eso es lo que se representa en una imagen virtual, por lo que no toma en cuenta lo principal: que el elemento a construir es precisamente para ser usado por seres humanos, cada uno con condiciones particulares y por tanto se debe procurar generar un elemento lo más incluyente posible”
Gran parte de la comunidad ha mostrado una respuesta positiva a la propuesta alternativa al puente. Si bien varios coinciden en que un puente útil para que una persona que goce de plena salud cruce, también reconocen que para una persona con discapacidad un puente representa un gran reto.
Constantemente se ha hecho la comparación entre la propuesta que hacemos los estudiantes con el paso peatonal frente a la Universidad Iberoamericana Puebla, pues esta vialidad tiene el mismo límite de velocidad que Cúmulo de Virgo (70 km/h), y tiene un semáforo para dar el paso al peatón.
Este ha sido considerado como más incluyente, barato y seguro que un puente. Es seguro pues a diferencia del puente, que permite que los automóviles sigan circulando a grandes velocidades, les obliga a detenerse para darle paso al peatón. Así se reducen riesgos, pues una vialidad con ese límite de velocidad es insegura para los peatones, con o sin puente.
Ahora quedan unas semanas para que se lleve a cabo la consulta en la que se definirá qué proyecto solicitará la BUAP a la Secretaría de Infraestructura, aunque serán las autoridades gubernamentales las que dirán la última palabra en el asunto.
Los que propugnamos por la propuesta del paso a nivel de piso creemos que es un pequeño pero significativo logro para el peatón, pues se hace en el contexto de una ciudad que es hostil para todas las formas de transporte distintas al automóvil.